Pescadores neozelandeses atraparon al Mesonychoteuthis Hamilton -que pesa unos 450 kilogramos y mide casi 10 metros- en el Océano Antártico en abril pasado y lo congelaron para su mejor conservación.
La operación para descongelarlo se inició en Wellington este lunes luego de ser aplazada durante 24 horas debido a temores de que una agilización del proceso podría dañar los planes de estudiar los órganos de la criatura.
El calamar fue sumergido en agua salada y en la medida en que se vaya descongelando, los expertos procederán a diseccionarlo.
Misteriosa
Su estudio aportará información sobre aspectos desconocidos de una de las especies más misteriosas de los mares, la cual fue identificada en fecha tan reciente como 1925.
Muy pocos especímenes de calamar colosal se han encontrado y el ejemplar en poder de los científicos neozelandeses es probable que sea el primero de su especie en llegar a tierra intacto.
El periodista de BBC Ciencia Richard Black informó que una de las primeras tareas de los expertos es comprobar el género del calamar.
Muy probablemente la criatura sea macho. Se cree que los ejemplares femeninos son incluso más grandes que los masculinos.
La descongelación y disección será transmitida en vivo vía internet en la página electrónica del Museo Te Papa de Nueva Zelanda.
En los próximos días se informará sobre los primeros resultados de los estudios, y los especialistas irán actualizando un blog con sus hallazgos.
Cuando concluya el proceso, el calamar será embalsamado y preservado.
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